Nuevo formato

El nuevo formato de debate es el mejor desde 1994, pero no es aún el idóneo. No obstante, contribuyó a que el debate fuera más fluido y entrenido para los televidentes, quienes presenciaron el cruce de opiniones, acusaciones y ocurrencias no vistos en los anteriores debates. Una falla del nuevo formato es que, una y otra vez, el candidato en uso de la palabra se quedara hablando sin micrófono. Por su parte, los conductores del debate evidenciaron lo que los candidatos no quieren, o no pueden, responder