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Columna

La Comisión Independiente de Investigación sobre la Pandemia de COVID-19 en México reveló datos impactantes: hubo 808 mil 169 muertes en exceso, de las cuales 300 mil pudieron evitarse con un mejor manejo. La pandemia dejó 215 mil niños huérfanos y 310 mil perdieron a su cuidador principal. La Ciudad de México, con solo el 7.3% de la población, registró el 24% de las muertes, y su esperanza de vida bajó 9.2 años. El 95% de los fallecidos murió en soledad. La pandemia provocó un aumento del 59% en la mortalidad materna y del 18% en las defunciones perinatales. El acceso a servicios de salud disminuyó drásticamente, y la privatización de la salud se incrementó. La pandemia también causó el cierre de un millón de negocios y la pérdida de empleo para 10.6 millones de trabajadores. A finales de 2022, solo el 62% de la población tenía el esquema completo de vacunación y ningún niño menor de 5 años estaba vacunado. Estos datos subrayan la magnitud de la tragedia y el silencio que la rodea