Doble fondo

Milenio

Columna

Especialistas y empresas internacionales han expresado que erigir la refinería de Dos Bocas en Tabasco, como quiere el presidente Andrés Manuel López Obrador, es más complicado y caro de lo que se pensó; además, han asegurado que echarla a andar llevará más tiempo del estimado. Pese a ello, el presidente considera que Pemex, la Comisión Federal de Electricidad y la Secretaría de Energía pueden hacerse cargo del proyecto y ser capaces de terminar la obra en unos tres años, con los mejores estándares y a menor costo, y con capacidad para refinar de inmediato grandes volúmenes. Esta decisión delinea a un presidente autoritario, con rasgos negativos de sus antecesores. Ojalá que esta obra no sea un monumento a su necedad